¿Qué es un neologismo?
Los neologismos son ciertos usos, expresiones y palabras que no existían tradicionalmente en una lengua, pero que son incorporados a ella debido a su necesidad de adaptarse a la realidad de sus hablantes. Es decir, son aquellas palabras y giros nuevos que los hablantes incorporan a un idioma, a medida que surgen nuevas cosas que nombrar y formas de hacerlo. Son lo exactamente opuesto a los arcaísmos.
La aparición de neologismos es un proceso común y ordinario en todos los idiomas, obligados como están a adaptarse y actualizarse, o morir. Sin embargo, una palabra puede considerarse un neologismo durante un tiempo determinado, ya que una vez que ha sido incorporada y normalizada como parte del idioma, sencillamente deja de ser una novedad.
Los neologismos pueden tener diferentes orígenes y pueden considerarse una fuente de riqueza lingüística, o un síntoma de degeneración y cambio irreversible. Lo más probable es que constituyen ambas cosas al mismo tiempo.
Orígenes de los neologismos:
1.- Siglas y acrónimos.- Sumando iniciales y primeras letras de una oración, se puede obtener mediante el uso y la repetición nuevas palabras de valor lexical propio, olvidando incluso que inicialmente se trataba de una forma de abreviatura. Es el caso, por ejemplo, de “láser”, que proviene del acrónimo en inglés de Light Amplification by Simulated Emition of Radiation (Amplificación de la Luz por Emisión Simulada de Radiación).
2.- Composición o parasíntesis.- Juntando dos o más palabras en una sola, se puede también “componer” literalmente un nuevo término. Este fue alguna vez el caso del término “Hispanoamérica” (composición de América Hispana), y lo es hoy el de “cortafuegos” (composición de cortar y fuego) en su significado digital (de internet).
3.- Métodos de derivación.- La adición de sufjos derivativos es una práctica tradicional a la hora de crear palabras. De hecho, muchas de las que hoy en día empleamos tuvieron alguna vez dicho origen. En ese sentido, continuamos creando nuevos términos, como “impresora” (derivación de imprimir + el sufijo “ora”, que otorga características) o “computadora” (derivación de computar + el sufijo “ora”).
4.- Préstamos del extranjero.- A menudo el idioma no tiene otra alternativa, frente a una realidad nueva, que acudir a otra lengua para crear un término nuevo, ya sea porque en esa otra lengua ya existe, o porque ésta lo tuvo primero. Es lo que ha ocurrido con términos como “craquear” (anglicismo, del verbo to crack: romper o abrir a la fuerza) o “hackear” (anglicismo, del verbo to hack: secuestrar o colarse en un sitio).
No hay comentarios:
Publicar un comentario